No te han llamado
Esperanza Aguirre es una gran política. Es una verdad que nadie puede poner en duda. Es, ahora mismo, la que más huevos tiene para plantarle cara a Zapatero y su desgobierno. Sin embargo, ahora se ha metido donde no la han llamado. Quiere (o ya lo ha hecho) modificar la ley anti-tabaco del gobierno, para permitir que se pueda fumar en más sitios. Los no fumadores dirán: "¿¡cómo que en más sitios!? ¡Si no hay ningún bar de no fumadores!" y ese es el problema.
La ley anti-tabaco, presentada por el Gobierno ZP es, y que dios me perdone, una buena propuesta de ley. Sin embargo, se ha pasado de buena. Digamos que tiene mucho "talante", que es lo que le gusta decir a Zapatero. Si un bar puede elegir entre fumadores y no fumadores, elegirá, de todas todas, de fumadores. Si toda la vida ha permitido fumar y le ha ido bien el negocio, ¿por qué cambiar ahora? ¡¡Que se jodan los no fumadores!! Seguirán entrando como toda la vida. Los únicos sitios que yo, como no fumador, puedo pisar sin salir con olor a cenicero, son los restaurantes VIPS (la publicidad es a propósito: boicot a los bares de fumadores; aunque ya tengo la ligera sospecha que volverán a marginar a la mayoría) ya que, en los Fosters, por ejemplo, hay habilitada zona de fumadores SIN LA SEPARACIÓN FÍSICA A LA QUE OBLIGA LA LEY. Pero claro, se ve que con la nueva ley de Aguirre eso no hará falta. ¡¡Que les follen a los fumadores!! Al fin y a la postre, solo son cerca del 70% de la poblacion. Nadie, poco más o menos.
"Una ley dura", dicen los fumadores; "nos están tratando como delincuentes", también suelen gritar. Pero el no-fumador no tiene derecho a expresarse. Pero la cuestión es que esa ley no es dura, no se trata a nadie como a un delincuente. ¿alguien ha estado en Italia en las últimas fechas? Pues resulta que yo si, y aquello si que podría llamarse "una ley dura". No se puede fumar en NINGÚN local. Ni en los bares, ni en las discotecas, ni en los pubs... Salías de la discoteca y olías a persona, no a cenicero; salías del bar y olías al cubata que te había caido encima. Eso, señores, es lo que debería ser la ley española anti-tabaco, pero no lo es. Y en Italia la pusieron de golpe, sin leyes progresivas. Y, lo más asombroso: Nadie se ha muerto. No. Todos siguen vivos. Si quieren fumar, se van a la calle y fuman. Y no pasa nada.
Aquí en España, sin embargo, es todo lo contrario. Tienen una ley que, siendo para favorecer a los no-fumadores, lo que ha hecho ha sido marginarlos más aún. Ahora mismo, en los bares de fumadores, se fuma más que antes, por lo que los no-fumadores aún nos fastidiamos más, somos más envenenados que antes, somos más asesinados (si, asesinados, ¿que pasa?). Valga el ejemplo: Once personas acuden a cenar a un restaurante; 4 de ellas fuman y el resto no ¿en qué zona del restaurante se van a sentar, en la de fumadores o en la de no-fumadores?
Como dijo aquél: "Los fumadores son las personas más tolerantes del mundo: nunca se han quejado de uno que no fume"
En fin, no-fumadores, compañeros, que somos gilipoyas y ya está