martes, 21 de junio de 2005

Todos con las víctimas

05-06-05


Ayer se celebró, como es bien sabido por todos, la manifestación en apoyo de las víctimas del terrorismo y en contra de la negociación con ETA.
Mucho se ha hablado de la manifestación y desde sectores pancarteros profesionales ya se apuntaba a que iba a ser una manifestación de salvajes, con destrucción de mobiliario urbano, agresiones varias, etc… Lamentablemente para ellos, la manifestación fue una muestra de civismo como pocas veces se ha visto en la historia de España. Atrás quedan las manifestaciones del “pueblo” en las que se destruían sedes de un partido político, se llamaba asesinos a los votantes y simpatizantes de cierto grupo parlamentario, etc…

A mediados de Enero se consiguió reventar una manifestación convocada por la AVT gracias a la actuación (y nunca mejor dicho) de un miembro del gobierno, que, acudiendo en calidad de ciudadano (eso si, acompañado por el fotógrafo oficial de su ministerio), fue “agredido” por golpes de aire y ondas de presión producidas por las gargantas de los asistentes, a lo que lógicamente se procedió a la detención de dos de los manifestantes (he aquí la casualidad que fuesen dos afiliados al PP) tras la denuncia hecha por José Bono en la Cisterna SER, que nadie sabe como consiguió llegar a la sede social del PSOE (Gran Vía 32) con los cientos y cientos de heridas que tenía.

Esta vez no lo consiguieron. Más de un millón de personas (según la delegación del gobierno, 240.000, que no es más que un insulto a la inteligencia humana) marcharon cívicamente por la defensa de un colectivo que cada día se siente más marginado y más insultado por el Gobierno: las víctimas del terrorismo (de ETA; los de la Majón bien que están). Como era de esperar, el único grupo político que apoyó la manifestación fue el PP, y ese fue el motivo que esgrimió “El País” (desde hoy, “La Bola”) para hablar en su portada de hoy de “El PP hizo de la manifestación de la AVT una manifestación contra el Gobierno”. Tal cual lo dicen y tal cual se quedan. ¿Sabrán esos miserables lo que es la vergüenza? No lo creo, sobre todo viendo que la destrucción de sedes del PP durante las democráticas manifestaciones contra la guerra de Irak (la segunda) fueron para ellos “pequeños sucesos a pie de página”.

No hubo agresiones, no hubo violencia; solo se oyó un grito: “España unida, jamás será vencida”. Pancartas muchas, y seguramente fue lo que más lamento Zapatero, ya que ve una pancarta y se lanza a la calle y en este caso no pudo. “PSOE, ven con nosotros”, “zETAp” y, por encima de todas ellas, una: “Negociación en mi nombre NO”. Y banderas constitucionales, nada de republicanas: la de España estuvo presente a cada pocos metros, y, además, debido a la gran afluencia de gentes de toda España, se pudieron ver banderas catalanas, valencianas, canarias, extremeñas, asturianas… Toda España se movilizó por una noble causa.

Como era de esperar, la demagogia de ZP ha aparecido en uno de sus discursos, llegando a decir que iba a escuchar la voz de los manifestantes (algo que dijo que no haría hace unos días), afirmando que el gobierno ya no acusa a nadie de pancartero y que no denuncia ni agresiones ni destrucción de propiedades privadas… ¿y como lo va a hacer si los que hacían eso están ahora en el Gobierno? Y TVE, “la televisión de todos”, hizo caso omiso de la manifestación, al igual que los “pocos” medios afines al gobierno. Tan solo la COPE fue actualizando la información de la manifestación y Telemadrid ofreció brillantes imágenes de ésta, pero ya no fue nada más. Antena 3 informó algo, pero de ahí no pasó.

De todas formas, ahí queda eso: más de un millón de personas se han manifestado contra un gobierno que lleva poco más de un año en el poder, y esto es tan grave que periódicos extranjeros como “Le Figaro” y “Le Monde” hablan ya de una bofetada al gobierno.

Y es que, meterse con las víctimas del terrorismo es meterse con todos los españoles.