martes, 21 de junio de 2005

Microsoft no es europeo

24-05-05

Sigo sin internet, esto es insoportable, dios mio, dios mio, esto es un infierno, como diría aquél. Pero por lo menos algunas noticias si que se pueden extraer y analizar del teletexto de TVE, aunque parezca increíble.

Que Microsoft (o Microchop que diría Bitnick) es una empresa americana lo sabe todo el mundo. Y aquí en Europa se sabe más que en otros lados por las multas y denuncias que le pone la Unión Europea a todos sus productos, en ese afán antiamericano que inunda a todas las instancias de la Comisión, hasta el punto de inventarse nuevas multas tales como pagar diariamente el 5% de las ventas diarias de productos de la empresa. No es amor, es una obsesión.

Lo último que le han pedido a Microsoft los europeos es que distribuya una versión de Windows XP que no contenga ni el Windows Media Player ni el Internet Explorer. Pero, lo más gracioso de todo, es que esta versión “light” (aunque, más que light, deberíamos decir “cuasi inútil”) de Windows debe ser igualmente atractiva para el usuario… Ya me imagino el anuncio: “Nuevo MS Windows XP ‘Comisión Europea’: ni puedes navegar por internet, ni puedes ver películas, ni puedes escuchar música… todo en un solo programa. Tu madre ya no tiene la excusa de que vas a ver páginas de guarradas por internet, porque no puedes. Compra ya Windows XP CE”. Y luego, de fondo, saldría una vocecita que diría: “¿Y el dinero que te ahorras al no tener que conectarte a internet?”.

Yo creo que la Unión Europea se está pasando en sus medidas “antimonopolio”, ya que luego es proteccionista hasta el infinito con los productos alemanes y gabachor, por ejemplo. Hacer a Microsoft vender un sistema operativo sin dos de las herramientas principales de todo ordenador es un insulto a todos los usuarios y a la empresa misma. Para eso que directamente prohiba la venta de productos Microsoft en Europa y ya estará todo solucionado, utilizando como sistema operativo la basura esa que inventó Siemens, que como es alemana si que será buena.
Personalmente esas medidas me la traen al viento, ya que ni utilizo el Internet Explorer ni utilizo el Windows Media Player, pero me pongo en el papel de una persona sin grandes conocimientos de informática (cualquier padre de familia, por poner un ejemplo) que compra un ordenador y que, como lo único que ha escuchado para que funcione es algo sobre Windows, pues lo pide tan contento él y descubre cuando llega a casa que no se puede conectar a internet y que no puede ver una película o escuchar ese cd que tanto le gusta mientras juega al pinball o al solitario (si no es que también los quiten en un futuro próximo). El hombre iría a la tienda donde compró el PC y preguntaría por qué no puede conectarse a internet, a lo que le responderían que no puede si no compra un navegador o si no se baja un navegador de internet (claro, que como no tiene internet, le tocará comprarlo). En ese punto, cuando el hombre se pusiese de todos los colores del arcoiris, el de la tienda le diría: “hombre, puede usted instalarse Linux” (que ese si que puede traer lo que se quiera, que como va contra Windows, la Comisión Europea lo ve con buenos ojos). Se instalaría el Linux y al día siguiente el hombre, todo feliz, volvería a la tienda preguntando por qué no le lee el cd, o por qué no puede conectarse a internet, etc… ¿Y por qué tendría todas estas interrogantes? Muy fácil: el Linux es un sistema operativo de mierda, que no es compatible ni consigo mismo y que para conseguir que algo sea detectado debes tener un máster en programación avanzada, que no todos lo tienen, por lo que yo me pienso. Y finalmente el señor en cuestión cogería el PC, lo devolvería a la tienda y se quedaría en casa viendo Crónicas Marcianas.

¿Por qué cualquier sistema operativo puede traer de serie programas tan necesarios como un reproductor de video o un navegador web, excepto el Windows? Las distribuciones de Linux vienen con cientos y cientos de aplicaciones, al igual que el sistema operativo MacOS, pero a estos no se les denuncia ni se les aplica sanción alguna.
Ya para rematar piden que tenga código abierto, es decir, que todo el mundo sepa como funciona para así fastidiar con más virus, los cuales, en su inmensa mayoría, están programados por los mismos personajes que crean Linux, y es por eso que para Linux no hay virus conocidos ni que haga falta instalarse antivirus, ya que lo que quieren es hundir más y más a Microsoft.

¿Por qué no dejar a la elección de la gente los programas que utiliza? Yo usaba IE, y me pasé al Firefox por la propaganda que salía en todas las páginas web del mundo, que decía que era la releche; lo probé y me pareció una tomadura de pelo, que no hacía mas que producirme errores en la tarjeta gráfica. Finalmente me instalé el Opera y soy la persona más feliz de mundo con ese navegador. Lo mismo me ocurrió con el WMP, que al final para ver pelis suelo usar el Media Player Classic (que es de los que inventaron el Linux) y para escuchar música uso el Winamp.

Seguro que en EE.UU. no le piden a Mercedes que los coches que venda ni lleven elevalunas eléctricos ni un motor más refinado que los americanos ni nada de nada. Cada uno puede vender lo que le plazca, que para algo es su producto. Y si a alguien le molesta, que se busque la vida e invente algo mejor