martes, 8 de marzo de 2005

La torre de Babel

¿A alguien le parecería normal escuchar a un diputado en el congreso de los diputados hablando en chino? Supongo que cualquier hijo de vecino diría: "Señoría, ¿puede usted hablar en castellano?". Por desgracia eso solo ocurriría en países medio decentes, que no es el caso de España.

La lengua castellana (o español, anglicismo adoptado para nombrar a nuestra lengua común) apareció allá por el siglo IX en las Glosas Emilianenses. Tras la reconquista, se unió España completamente, conformando un Reino, que ha durado hasta hoy día, convirtiendo a España en una de las naciones mas antiguas del mundo. Con la unión, se decidió adoptar una lengua común a todos los españoles, y ésta fue el castellano. Podría haber sido el catalán o el gallego (e incluso el bable), pero se eligió el castellano (no se por qué, pero lo acepto, no me veo en ningún problema al usarlo). Las ventajas de tener una lengua común son inmensas, y creo que a cualquier persona se le ocurrirían: facilidad de comunicación en toda España, homogeneidad en los estudios, etc... Todas estas ventajas parece que no son tales, si no que son una "opresión centrista"(¿?), según afirman algunos diputados. Primeramente, los diputados de ERC salían a tribuna a hablar, lo hacían en catalán, con el consiguiente cabreo del Presidente del Congreso. Pero un día en el que el Sr. Marín no estaba, la Sra. Carmen Chacón (Carma para los amigos) permitió una pregunta en catalán y que el ministro Montilla respondiese, sin que hubiese traducción de la pregunta, como se pudo observar en las transcripciones de la sesión, donde se puede leer: "hablan en catalán", sentando un nefasto precedente. Por esto, el Sr. Manuel Marín, presidente del Congreso, decidió que se puediese hablar en la lengua de la región del diputado (gallego, catalán, euskera, valenciano (aunque esta última se encuentra marginada, siendo mas antigua que el catalán), etc...) que habla, siempre y cuando tras hablar en su propia lengua debía traducir lo que decía. Esta medida le duró al Sr. Marín una semana, ya que a la semana, y ante las chulerías continuas de ERC, decidió volver atrás en su posición. El mismo Sr. Marín habló de "error" al permitir la norma. Pero ahora, nuevamente, los partidos políticos, con la única excepción del PP, piden de nuevo que se pueda hablar en cualquier idioma que hay en España (bueno, no cualquier idioma, ya que el valenciano no lo consideran lengua, al igual que el bable o el panocho, por poner mas ejemplos).

Seguramente esto es una necesidad perentoria para el funcionamiento democrático de España, válgame Dios. Seguramente esto vendrá también con el código de austeridad del Gobierno, ya que, al final lo que tocará será contratar a traductores para que el funcionamiento de la cámara sea el óptimo para el funcionamiento óptimo de la democracia. Esto demuestra, una vez mas, el servilismo de este gobierno con lo que piden los nacionalistas catalanes.

¿Para qué una lengua común?, eso no es "progre". Hay que fomentar la multiculturalidad, aunque se viole el artículo 3 Título preliminar ("El castellano es la lengua española oficial del Estado. Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho a usarla."). Para ser profesor en el País Vasco hay que tener el nivel 3 de Euskera, en Cataluña solo se puede dar clase en catalán,... En definitiva, se está violando la Constitución y nadie hace nada. A los constructores de la torre de Babel Dios los castigo haciendo que no pudiesen entenderse unos con otros; a nosotros nos ha castigado con los nacionalismos excluyentes (aunque no los hay de otro tipo)